Día 144: Los pecados capitales

Día 144: Los pecados capitales:

¡Hola tomatitos cherry míos!

No os asustéis por el título de la entrada, la temática del blog no ha cambiado, pero sin duda los pecados capitales me vienen estupendos para hablaros de lo que quiero hablaros hoy. Vamos a recuperar un poco una lección de conocimiento popular, los siete pecados capitales son:
-Avaricia.
-Ira.
-Soberbia.
-Envidia.
-Lujuria(de esto siempre mucho)
-Gula(con la dieta poca)
-Pereza.

De eso vengo a hablaros, últimamente me siento perezoso, creo que empiezo a notar la acumulación de cansancio, de juntar las sesiones de deporte con las tardes de estudio intensivo y eso que duermo ocho horas, que es la cantidad recomendada. Pero es que entre eso, el frío, por las mañanas me cuesta horrores levantarme, después me pongo al lío, pero buf.
Que bien salio la autofoto, ni queriendo sale igual de bien.

Comida:
Desayuno: Tostada y colacao.
Comida: Conejo.
Cena: Tortilla francesa y caldito.




Deporte:

¿Os acordáis de esta entrada? Fue el último día en el que corrí, hice un total de 22 minutos, pero no corriendo completos, porque primero empiezo corriendo 5 y después al acabar otros 5. Hoy que tocaba spinning y bodycombat, el primero bien, ya hicimos una toma de contacto con el ejercicio de alta intensidad y vaya si es alta intensidad. Pero el quid de la cuestión vino después, parece ser que la gente hoy estaba con la pereza y en la clase de bodywork, éramos el monitor y yo y le dije que para vernos las caras los dos lo dejábamos para otro día y como sentía que no tenía suficiente con spinning decidí subirme a correr un rato. Las cifras oficiales las tenéis en la foto, pero os las desgloso yo, 15 minutos de calentamiento, relajación, me refiero a 10 minutos andando para calentar, y al final 5 minutos para pararme, ya sabéis que para súbito no esta nada bien, eso me deja con una carrera de media hora *o* sin duda para mi eso es todo un logro y más cuando llevaba 15 minutos de carrera tan solo bajé el ritmo dos minutos para bajar un poco de pulsaciones y tener respiro. Paré cuando hice media hora de carrera porque mis rodillas ya suplicaban un poco de respiro. Al final mereció la pena que saliera de la cama, cosas así son una inyección de felicidad para mí.




2 comentarios:

Ana Guerrero

3 de febrero de 2013, 16:12
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1

dijo...

Pensaba que había comentado esta entrada pero... ¡más vale tarde que nunca!
Pues la verdad es que no eres el único que lo va notando, yo cada día que pasa siento más que nunca como una fuerza sobrenatural me impide levantarme de la cama T___T
Y respecto al tiempo que pudiste correr, ya te lo dije en su momento, pero me siento orgullosa y feliz de como vas superando tus propias metas :D ¡sigue así porque vas a conseguirlo todo!

Tillocai

3 de febrero de 2013, 22:35
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1

dijo...

@Anita Ya abandoné cualquier esperanza que comentaras aquí. Eso es que necesitamos una cura de sueño, de estas de echarte a dormir y no levantarte en dos o tres días.
Espero que con el tiempo pueda correr una hora.

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